Tenrikyo Europe Centre
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Maria Nazareht Mondelo Carballada (Jefe de la Galicia Casa Missionera)
Hoy brevemente me gustaría contarles la historia del comienzo de Terikyo en Galicia y de mi propio comienzo en Tenrikyo.
Nuestro Fukiosho comienza su andadura en Tui, pequeña ciudad gallega, situada al borde del río Miño que hace frontera con Portugal, país al cual se puede cruzar andando a través de un puente.
Se funda el dia 3 de junio de 1994. El Tsutome de entronización está presidido por el entonces Kaichosan, Maestro Shin.
En el año 2000 viajan a Japón para visitar a su familia, Kodama san y Pilar san, su esposa.
Ella visita por primera vez Jiba y compran libros y folletos. De vuelta en el avión comienza a leerlos y al llegar a La Coruña escribe a Kaigaibu y pregunta si hay algún misionero en España para poder ponerse en contacto con él. Así conoció a María san y el Fukiosho que había en Tui.
Después de un tiempo acudiendo al Tsukinamisai y tras las conversaciones y permisos correspondientes María san y el Fukiosho se trasladan a La Coruña en el año 2002.
Yo llegué a este camino a través de mi hija Ayssa, alumna de karate en el gimnasio de Kodama san. Recibí mi primer Sazuke el día 28 de agosto del 2002. Ella recibió Sazuke en enero del 2004 y en abril hizo el curso de Shuyoka.
Yo nací y me crié en el seno de una familia católica,, religión que he seguido siempre hasta que en un momento de mi vida y por diversas circunstancias sentí que la Iglesia Católica no me aportaba lo que yo necesitaba y dejé de practicar y asistir a sus ritos. Seguí creyendo firmemente en Dios y rezando una oración que para mí fue muy importante. El PADRENUETRO.
Cuando comencé a visitar el Fukiosho, yo no sabía nada sobre Tenrikyo. No sabía si era una secta o qué tipo de enseñanza era la suya. No tuve duda alguna porque fue Kodama san quien me lo recomendó. Confiaba y confío plenamente en él. También pensé: No tengo nada que perder y si puedo tener mucho que ganar”.
A mi marido que era católico fervoroso no le gustaba que nosotras, su hija y su esposa, frecuentasen el Fukisoho. Nosotras le decíamos que íbamos a clase de ChiKung al gimnasio.
Sin insistirle nunca él poco a poco fue acercándose a tomar café con María san, momentos que ella aprovechaba para hablarle de este Camino.
En Febrero del 2004, falleció mi madre. Ella fue una persona maravillosa a la que sigo echando de menos mucho. Desde que María llegó a La Coruña, mi madre recibió Sazuke devotamente.
En Agosto y setiembre de este mismo año, nacen Alex y Dani, dos de mis nietos. Ayssa soñaba que Alex nacía sorda. En esos momentos con una preocupación relativa, hice compromiso con Oyasama que si los niños nacían bien yo recibiría el Don Divino del Sazuke y haría Shuyoka. Los niños nacieron perfectamente y yo recibí Sazuke el día 23 de Enero del 2005.
En enero del 2006 mi marido sufre un Ictus que le dejaba al borde de la muerte o de convertirse en un vegetal. Gracias a la protección divina de Oyagamisama/Oyasama nada de eso pasó y cuando le dieron el alta él decide viajar de regreso al Jiba para recibir Sazuke y hacer Shuyoka conmigo.
Recibió el Don Divino el 26 de Julio de 2006 y a continuación comenzamos el curso de Shuyoka impartido por primera vez en español. Realizándolo yo sentí en mi corazón que seguiría este camino el resto de mi vida.
María san por motivos familiares debe regresar a Buenos Aires y el Kaichosan me pide que yo me haga cargo del Fukiosho. Acepté e hice el curso de Kenteikosho en abril del 2009 y desde entonces desempeño este cometido.
No ha sido fácil el camino porque yo no tenía experiencia ninguna y era una recién llegada. Solo 4 años desde que recibí Sazuke. A duras penas me sabía los Himnos sagrados. Gracias a la colaboración de mis hermanos yobokus hemos podido llegar hasta el día de hoy que seguimos trabajando en la difícil tarea de ayudar a quien nos necesita y divulgar las Enseñanzas de Oyasama.
Mis experiencias a lo largo de estos años han sido muchas y muy positivas. He sentido la protección de Dios en mí y en mi familia.
Estos últimos años, desde el fallecimiento de mi marido, he pasado por varias y difíciles operaciones quirúrgicas de las que me he ido recuperando muy bien gracias a que Oyasama siempre me acompañó al quirófano. Yo le decía: “Madre no te olvides que hoy tienes quirófano”. Ella nunca se olvidó.
Solamente quiero añadir que sigo creyendo que este es el Camino que quiero seguir y que mi determinación de servir a Oyasama es sincera y que siempre estaré a su servicio para ayudar a quién necesite encontrar su camino.
No quiero dejar de agradecer al Maestro Shin, Kaichosn en el momento que yo conocí Tenrikyo, por sus consejos, su paciencia y su confianza en mí. Por mi falta de experiencia he estado en profundo desacuerdo en algún momento con él. Hoy siento un profundo cariño y respeto hacia el Maestro Shin y su señora.
Nuestro actual Kaichosan, Yoshikune sensei, ha estado a mi lado desde que regresé a Ojiba para recibir Sazuke. Siempre he contado con su amistad a nivel personal y nos ha demostrado a mi marido y a mí su apoyo y su cariño. Hoy como Kaichosan de nuestra Iglesia cuenta con el respeto, la confianza y el cariño de todos nosotros, los creyentes de Tenrikyo Galicia.
Quiero agradecer a Hasegawa-san por esta oportunidad para hablar del comienzo de Tenikyo en Galicia y de mi proprio comienzo en Tenrikyo.
Muchas gracias Hasegawa san y muchas gracias a ustedes por su atención.