Enseñanza de Tenrikyo

Lo Prestado y Recibido en Préstamo

La gente considera su cuerpo como algo propio, pero se nos enseña que en realidad es una cosa prestada por Dios Oyagami. Solo el corazón nos pertenece. Todas las providencias, empezando por las que sustentan nuestros cuerpos, se dan de acuerdo al uso de nuestro corazón.

En el Osashizu del 14 de febrero de 1889 leemos: «El cuerpo humano es una cosa tomada en préstamo y sólo el espíritu es propio. De un solo espíritu brotan muchas acciones todos los días». Por lo tanto, es muy importante utilizar nuestro cuerpo prestado de acuerdo con la Voluntad de Dios Oyagami. Sin embargo, desconociendo esta verdad, usamos el cuerpo para nuestros propios fines egoístas lo que no nos permite recibir completamente la Providencia Divina. Con el tiempo incluso puede acarrear molestias en el cuerpo.

El uso del corazón que no está de acuerdo con la Intención de Dios Oyagami se compara con el polvo y se nos enseña a limpiarlo constantemente.

El uso del corazón que puede recibir la providencia de Dios es el corazón sincero. Se nos enseña que la forma más elevada de corazón sincero es el corazón de salvar a otros.

La palabra préstamo comúnmente significa recibir algo que pertenece a otra persona con la intención implícita o explícita de devolución. Nosotros finalmente devolvemos el cuerpo prestado a Dios Oyagami. A este hecho se le denomina Denaoshi, Partida para Renacer. Se nos enseña que nuestra alma eterna recibirá un nuevo cuerpo prestado y volverá a renacer en este mundo.

Acerca de "lo recibido en préstamo" en el Osashizu del 28 de julio de 1888 se lee: «El hecho de no poder usar el cuerpo como deseamos es la evidencia de que es algo prestado». Al enfermarnos es cuando por primera vez nos damos cuenta de que no podemos utilizar nuestro cuerpo como queremos.

El Ofudesaki dice:

Este universo es el cuerpo de Dios.
Reflexionadlo paso a paso en todos los asuntos.Ofudesaki III: 40, 135

Todos los cuerpos humanos son préstamo de Dios.
¿Con que pensamiento lo estáis usando?Ofudesaki III: 41

Como se deduce de estos versos del Ofudesaki, la enseñanza de «lo prestado y recibido en préstamo» subyace en la consideración de que este universo es el cuerpo de Dios Oyagami. En otras palabras, estamos tomando en préstamo una parte del cuerpo de Dios Oyagami que es el universo entero. Por lo tanto, el cuerpo humano y el universo se rigen por una única Verdad del Cielo.